Artículo de psicología | PSICOLOGÍA ARIAS

INFORMACIÓN PARA PADRES SOBRE TDAH

● Un niño hiperactivo necesita:

o Una familia con normas claras y bien definidas.
o Que presenten una exigencia adaptada a la medida de sus posibilidades.
o Un ambiente ordenado y organizado.
o Sereno, relajante, cálido.
o Una familia que reconozca el esfuerzo realizado por el niño.
o Que le anime y proteja sin una sobreprotección excesiva.
o Que le ayude a situarse y organizarse.
o Pero sin dejarse manipular por caprichos.
o Manteniendo los límites educativos de forma racional, estable e inamovible.
o Que le ayude a encarar los problemas y a encontrarles una solución sin encubrir innecesariamente sus faltas.

● Para cumplir bien el papel que le corresponde a los padres necesitan:

o Un diagnóstico temprano de la situación en la que se encuentra su hijo/a.
o Información clara de qué es el Trastorno por déficit de Atención con Hiperactividad.
o Información sobre el grado de afectación de su hijo.
o Tener presente que el problema tiene solución, pero que, de no tomar las medidas oportunas, irá creciendo en los próximos años.
o Disponer el asesoramiento adecuado sobre aspectos educativos generales.
o Recibir instrucción directa sobre el tratamiento general del niño y específica sobre las pautas de actuación para casa.

● En manos de los padres está:

o Coordinar el intercambio de información entre el neurólogo, el psicopedagogo y el profesor de aula
o Proveer de un ambiente familiar estructurado.
o No activar al niño con su comportamiento.
o Poner límites educativos correctos, adecuados a la capacidad del niño.
o Favorecer la autonomía personal del niño.
o Crear buenos hábitos de estudio.
o Modelar conductas reflexivas.
o Reforzar su autoestima.
o Generalizar la utilización de autoinstrucciones.
o Favorecer el contacto controlado con otros niños.
o Respetar los acuerdos entre padres o cuidadores con respecto a exigencias, normas y actitudes, etc. frente a su hijo.
o Hablar en términos más adecuados (pensar primero, luego actuar).
o Controlar y reaccionar las emociones.
o Establecer rutinas claras (hojas de hábito) de acuerdo con las pautas de colegio (horarios, tareas lugar, tiempo de observaciones, televisión, etc.).
o Dar responsabilidades.
o Reconocer los esfuerzos por mínimos que sean.