¡ACTUEMOS CON EFICACIA!

Que si vale la pena hacer algo
vale la pena hacerlo bien.

Para ser eficaz en mi tarea,
y éste es, para mí, el mejor momento,
con el golpe de azada que estoy dando
he de lograr que el surco quede abierto,

pues no es ser eficaz trabajar mucho,
sino hacerlo bien y a tiempo
y lograr que esa labor bien hecha
convierta en realidad un sueño.

Ser eficaz no es escalar bien,
sino llegar al pico ya propuesto,
no es tirar, sino dar en el blanco.
No es navegar, sino llegar a puerto.

Yo lo seré si llega a ser espiga
la semilla de trigo que ahora siembro
para que, junto a harina de otros granos,
sea ella eficaz hecha pan tierno.

Que si sólo estos versos aquí unidos
ayudan a impulsar un sentimiento
y hay alguien que se sienta más capaz
de ver en la tarea un nuevo reto,
eficaz habrá sido mi labor:
Semilla y labrador irán creciendo.